Una de las enfermedades más comunes que a menudo afecta a muchas personas es el glaucoma. Afecta al nervio óptico y es una enfermedad crónica y progresiva, por lo que no debe subestimarse. Según datos recientes publicados por la Asociación Italiana de Estudios de Glaucoma, 1 millón 200 mil personas lo padecen en Italia y 55 millones en todo el mundo. Además, 1 de cada 5 pacientes tiene riesgo de perder la vista.
La única causa reconocida hasta ahora es el aumento de la presión intraocular. Por este motivo, la mejor forma de prevenir la enfermedad y sus consecuencias más graves es el diagnóstico precoz.
En primer lugar, hay que decir que se trata de una enfermedad tortuosa, que no presenta síntomas y, por tanto, de difícil diagnóstico. Sin embargo, desde este punto de vista, es útil tener un examen ocular que permita identificar el glaucoma. Por ejemplo, a través de él es posible medir la presión ocular y evaluar una serie de factores que son importantes, como la familiaridad comprobada de algún familiar. Luego, el glaucoma se presenta con un estrechamiento del campo visual y, por lo tanto, comienza a limitar la posibilidad de ver. Además del examen de la medición de la presión ocular, el examen del campo visual y la OCT son útiles.
Finalmente, en la actualidad existen varios tratamientos que permiten tratar esta patología invalidante: desde la terapia con láser hasta la médica, hasta la quirúrgica, es posible utilizar dispositivos valvulares de última generación que permiten un mejor curso postoperatorio que el que permitía la cirugía. tradicional del pasado.